Cómo perdí 20 kilos

En los últimos 2 años he conseguido perder 20kg y no recuperarlos, el proceso ha sido lento, pero creo que en todo este tiempo ya se puede decir eso de que no ha habido el famoso «efecto rebote«.

Un buen día me pesé y descubrí que había llegado a un punto malo, así que fui al médico, el cual me hizo unos análisis y me pesó. Me puso una dieta, con la que pasaba mucha hambre, todo hay que decirlo, pero que me permitía ir viendo como bajaba el peso poco a poco.

Otra cosa que hizo el médico fue ponerme a andar, una hora cada día, y empecé a hacer lo que me dijo el médico escrupulosamente, menos algún día, pero no pasaba nada, mi salud mental también importaba, era un día suelto en una carrera de mucho tiempo, así que sin problemas.

Empecé muy bien e iba todas las semanas al médico, básicamente a pesarme y a charlar con el médico, luego empecé a ir cada 2 semanas hasta que al final por alguna razón que no recuerdo dejé de ir, pero ya tenía el hábito y sabía lo que tenía que hacer.

Otra cosa que hice fue empezar a ir a trabajar en bicicleta + tren, al principio llegaba ahogado, pero poco a poco fui cogiendo algo de forma, y eso que no hacía más de 5 km en bicicleta seguidos.

Con el tiempo empecé a andar más, hasta que llegó un momento en el que andaba 3 horas diarias, pero claro, si andas 3 horas diarias no puedes o trabajar o ver a tu familia, a elegir, el día no tiene tantas horas, así que empecé a correr, poco y mal, pero a correr, algo totalmente impensable solo un año atrás.

En Noviembre de 2015 iba a ir a mi primera carrera de 10km, pero la rodilla me jugó una mala pasada y no pude ir, pero el 6 de Marzo fui a una carrera a Pinto, 10km, que, gracias a Joseba y Jose, dos compañeros del trabajo, pude terminar porque me hicieron básicamente de liebre, y llegué.

Luego el 16 de Mayo corrí otra carrera de 10km en Madrid que pude terminar y el 16 de Julio la emoción me llevó a apuntarme a una de 15km, la cual terminé, pero no corriendo, los últimos kilómetros iba arrastrándome como una serpiente, aunque en los primeros 10km mejoré mis tiempos, en esta pasé por la meta yo solo, al fin y al cabo eso cuenta, ¿no?

En Agosto ya me apunté al polideportivo de mi pueblo, donde hay un gimnasio bastante majo y donde procuro ir dos veces por semana.

Aunque quizás lo más importante ha sido cambiar a la bici mi vehículo de transporte, este último año lleva más de 4.000 km, que quizás no sean muchos, pero son los que necesito para moverme junto al tren.

El resultado es que estoy muy contento, no, no soy un atleta, pero me encuentro bien y me lo paso bien, creo que es el objetivo.

En cuanto a la comida ahora como un poco diferente, me acabé acostumbrando a la dieta que me puso el médico, y sin pasar hambre.

Así que si a alguien se le ocurre hacer algo así ya sabéis, al médico y a andar, el resto vendrá solo.